NIÑOS RESILIENTES
“Los recien nacidos no pueden ir a parar a ningún otro sitio que no sea la historia de sus padres.” Boris Cyrulnik
- UNA HISTORIA CUALQUIERA
- ¿QUÉ ES LA RESILIENCIA?
- FACTORES DE PREVENCIÓN
1. UNA HISTORIA CUALQUIERA
Se inició en el camino de la vida aprendiendo desde las trincheras, sin protección, sólo dejando que su mente asimilara el dolor de las ausencias verdaderas. Ahora recuerda que creció en un país de desequilibrios marcados y de fuerte pobreza. Su madre se encontró con ella sin buscarla y seguramente, piensa ella ahora, nunca quiso alejarse, simplemente intentaba sobrevivir en un entorno donde los recursos eran escasos y caros de conseguir. Ella recuerda estar sostenida por brazos ocupados y por diálogos sonoros con miradas esquivas. Creció en un territorio sin límites, el que se deriva de las dificultades de sobrevivir y así aprendió que era mejor mirar y callar, mirar y esperar a que las cosas cambiaran de color. Su mundo era incierto, desordenado y ella intentaba buscar el orden en su interior y preguntarse qué estaba pasando ahí fuera, qué significaban esos comportamientos ajenos a sus deseos, y por qué las personas la trataban así. De repente su vida dió un vuelco y se vió metida en un avión rumbo a nuevas aventuras y aterrizó en un nuevo territorio donde la esperaba su madre con una nueva vida y unas manos tendidas para sostenerla y acompañarla. Consiguió adaptarse rápido y las nuevas condiciones le dieron la oportunidad de buscarse, de intentar entender, de aceptar y de construir. Aunque no todo fue tan rápido. Su adolescencia le jugó malas pasadas y la falta de confianza en ella y en el mundo se sustituía por la ira, la rabia. Aún así su fortaleza interior, cultivada desde pequeña, la ayudó a entender que la verdadera búsqueda estaba en ella y que debía apostar por crecer. Y empezó a mirar a su alrededor con otra actitud y encontró otros ojos que la veían desde el corazón. Y desde ese lugar apostó por quererse, por querer a los otros y entender el mundo que la rodea como un hogar más confortable donde ubicarse y encontrar su esencia. Ahora piensa que sólo es el principio, que aún queda mucho por hacer pero que las palabras, el deseo de aprender y sus ganas de apostar por la vida son su plataforma de vida y de esperanza.
Ésto es un esbozo de una historia cualquiera, que como tantas en nuestro planeta, viven una vida difícil y con obstáculos importantes en su camino. No todos respondemos igual delante de las dificultades. Nuestra fortaleza, disposición, aptitudes y actitudes delante de nuestro entorno pueden marcar las diferencias y frente a la misma dificultad unas personas consiguen construir una vida saludable y otras, sin embargo, vencerse y dejarse ir hacia caminos más desadaptativos e insanos.
2. ¿QUÉ ES LA RESILIENCIA?
La resiliencia hace referencia a la capacidad de cualquier ser humano de recuperarse después de una situación traumática o en su dimensión más leve de una situación de desequilibrio emocional o afectivo sostenidos en el tiempo.
La infancia es un periodo frágil donde el ser humano es más indefenso y posee menos recursos para manejar situaciones difíciles y también donde los vínculos de apego están en juego. Cyrulnik, psiquiatra que acuñó dicho término y autor de Los patitos feos, después de haber sufrido una infancia marcada por la muerte de su familia en los campos de concentración nazis, ofrece una visión esperanzadora de nuestra capacidad para recuperarnos de situaciones de impacto emocional grave.
Nos habla de una especie de mecanismo de autoprotección que se va tejiendo en la infancia, después del impacto, a través de establecer nuevos lazos emocionales con el entorno más próximo y de la expresión de las emociones a través de la palabra, del arte, la música o el teatro. De esta manera aquello que parecía irrecuperable puede llegar a elaborarse. Expresar un relato de vida que visto desde otro lugar puede compartise y, haciéndolo, poder aceptar el dolor que causaba.
Cyrulnik diferencia entre trauma y sufrimiento. El primero afecta a toda nuestra actividad cerebral. Es como si el cerebro se apagara, perdiera energía mientras que una situación de adversidad no lo hace, sufrimos pero el cerebro sigue funcionando y funciona bien si hemos sido fortalezidos en nuestra infancia temprana. Si bien las escalas de impacto de los traumas no están estudiadas algunos de nosotros conocemos o hemos conocido historias de recuperación y de lucha frente a la adversidad de la vida. No todos los entornos son adaptativos ni todas las realidades son sanas.
3. FACTORES DE PREVENCIÓN
Sabiendo pues que la resiliencia es una fuerza que se desarrolla frente a la adversidad hemos de intentar prevenir sufrimientos gratuitos para los niños y niñas que nos rodean e intentar ofrecer herramientas de adaptación al entorno sanas y resilientes.
He aquí algunos factores a tener en cuenta:
- Proporcionar entornos seguros y estructurados
- Evitar situaciones de precariedad social y cultural
- Trabajar el vínculo y el apego familiar
- Poner freno a la cultura del sprint y de las prisas generadora de conductas de ansiedad
- Acompañar a los niños y a las niñas en su crecimiento sin caer en la sobreprotección ni el abandono
- Fomentar la creatividad en la infancia trabajando a partir de la autonomía de los niños y de las niñas
- Potenciar la palabra y la comunicación verbal como herramienta terapéutica
- Educar en las artes en toda su extensión: música, teatro, cine, expresión artística, los cuentos
- Cuidar las primeras etapas del desarrollo del niño cuando su fragilidad es mayor a los impactos del ambiente
Seamos conscientes de nuestras posibilidades para hacer de nuestro mundo un lugar seguro y digno de ser vivido para los niños y las niñas que forman parte de él. Cuidemos nuestros vínculos, potenciemos la comunicación y tejamos con nuestras miradas compasivas una realidad donde merezca la pena habitar.
Cristina López
Psicóloga